lunes, 9 de enero de 2017

#85 - Contando días como un preso

Hace 3 semanas decidí tirarme al vacío. No me importó la plata, el trabajo o el hecho de irme sola, sin compañía, a países de los que no entiendo ni sé nada. Me tomé en serio el hecho de vivir mi vida a mi manera. No soporto trabajar bajo presión, bajo límites y reglas que no tengo ganas de obedecer. Decidí ser valiente y hacerle caso al corazón. Es como si de repente, el tatuaje de mi espalda penetrara lentamente en mi cerebro y mi alma. "Sé libre, viví libre, Ani, no seas como el resto que se acobarda." 

"¿Trabajo? Sos joven, podés conseguir en otro lado. Y sino, te la rebuscás, como siempre lo hacés. ¿La plata? No hace falta ser millonario para viajar. Viajá rasca, viajá tranquila y en paz, las cosas se van a ir dando solas. Salí a probar tu teoría de que existe la gente buena onda, de que podés encontrar amigos en cualquier parte del mundo. Probate a vos misma de lo que estás hecha. No importa que te vayas sola, animate."


Y así fue. Hace 3 semanas compré un vuelo Córdoba-Madrid (con escala en Santiago de Chile). Me voy 42 días a Europa, sola. Primera vez que voy a salir del país, primera vez que viajo sola. Mi cuerpo pedía aventura, se la estoy dando! Y puedo decirles que siento un terrible alivio en cada centímetro de mi ser. 

Siento todo menos miedo. Estoy ansiosa, nerviosa, pero sobre todo súper feliz. No me preocupa qué va a pasar con mi trabajo, no me preocupa la plata, ni el hecho de pasarme 42 días rodeada de gente desconocida, lejísimos de casa, sin entender mucho algunos idiomas. No me preocupa absolutamente nada de eso, es como si de repente mi espíritu se regocijara al fin con esta inmensa libertad que me estoy auto-regalando. Libertad de moverme como quiero, cuando quiero y por el tiempo que quiero. Libertad! Como si todo este tiempo hubiese estado en una jaula y pudiera vislumbrar entre los barrotes una pista de vuelo, que se construye día a día.

Presa de la rutina, así me siento. ¿No les pasa? ¿No quieren huir? ¿Tomarse un respiro, un pequeño descanso? Soy una presa, tachando día a día el momento final del gran despegue. Emoción en todo el cuerpo, eso siento. La exquisitez de esta sensación... se las recomiendo. Háganlo, tírense a la pileta por su sueño. No tengan miedo, todo su potencial está AQUÍ y AHORA no en los "me hubiese gustado".

No hay comentarios:

Publicar un comentario